Ante la sagrada imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, se postraron ayer sus Majestades de Oriente, los tres reyes que adoraron al Señor, y trajeron consigo los regalos para niños y mayores.
Tras hacer la entrega en la capilla de la hermandad a los más pequeños, partieron hacia la residencia Sor Ángela de la Cruz donde allí los esperaban las hermanas y mayores, donde les dieron sus regalos. A continuación se dispusieron hacia el centro Oasis, con el que la hermandad colabora asiduamente, y por último en la hermandad del Rocio de Emigrantes, el coro y una gran cantidad de jóvenes rocieros recibieron con cariño a sus Majestades.